Los equipos localizadores de arquetas ocultas funcionan por emisión de frecuencias que nos permiten conocer el trazado de las redes de saneamiento enterradas.
Este equipo consta de un emisor de señales que se coloca en la manguera o en la cámara que se introduce en la red y un detector ubicado en la superficie. El aparato receptor detecta la señal
emitida por la sonda y ajustando los valores nos indica el punto exacto de localización del pozo o
arqueta oculta y la profundidad a la que se encuentra.
Así, conseguimos localizar de manera precisa la situación de la arqueta y el trazado de la red
enterrada, lo que se traduce en menos costes al evitar las roturas en el pavimento.
Gracias a estos sistemas innovadores de radiodetección localizamos rápidamente y con
total garantía cualquier sistema enterrado en el subsuelo, sin necesidad de roturas innecesarias.